LA CLASE OBRERA no tiene hoy una expresión política propia, que haga escuchar a nivel nacional la voz de los trabajadores, que represente sus demandas inmediatas y sus intereses históricos como clase, que pueda plantear una política independiente para enfrentar a la derecha en crisis como la actual.
Hay que cambiar esta situación. Los miles de obreras y obreros que cada día con mayor confianza en sus propias fuerzas discuten cómo organizarse en su lugar de trabajo, cómo reclamar por el salario o contra la prepotencia patronal, que se interesan por lo que ocurre en el país y por las experiencias de otros trabajadores, necesitan también una herramienta política. Es que no basta con la lucha a nivel sindical. Ésta es fundamental, pero no alcanza para asegurar respuesta las demandas ni para abrir una perspectiva distinta, una respuesta de los trabajadores a los grandes problemas nacionales.
Lamentablemente la dirección de la COB, subordinada al gobierno, “cajoneó” el debate sobre un instrumento político de los trabajadores. Sin embargo, la necesidad de una herramienta política de la clase trabajadora, independiente del gobierno y de los empresarios y basada en los sindicatos, se hace sentir cada vez más.
¿Cómo avanzar? Un primer paso es defender y recuperar la plena independencia política de la COB y nuestras organizaciones sindicales frente al gobierno del MAS y los partidos empresariales. Un segundo paso es abrir el debate entre los sindicatos combativos y los trabajadores en general sobre cómo avanzar en la organización política.
Los socialistas revolucionarios de la LOR-CI proponemos discutir las bases de un gran partido o instrumento de los trabajadores, basado en los sindicatos, con democracia obrera y donde discutir qué programa hace falta para transformar el país en función de las necesidades de la clase obrera, el pueblo pobre y los pueblos originarios