El sindicato continúa discutiendo con las autoridades del Ministerio de Minería y de Trabajo su planteamiento de administración autónoma de la Empresa Minera Huanuni.
Los trabajadores están en contra de que su fuente de trabajo siga siendo administrada por la burocracia estatal desde La Paz, a través de COMIBOL.
La experiencia del “control social” que les ha permitido defender su fuente laboral, desarrollar la producción, crear miles de nuevos puestos de trabajo y aumentar los recursos para el Estado así como para mejorar las condiciones laborales y el salario, los alienta a seguir adelante con este reclamo, pese a la rotunda negativa que hasta ahora han recibido de parte del gobierno.
El gobierno o bien rechazará la gestión por los trabajadores, o bien tratará de recrear la “cogestión”, una vieja táctica de subordinar a las organizaciones obreras en los directorios controlados por el gobierno, para que actúen como “correa de transmisión” de sus políticas y evitar que los trabajadores impongan una gestión obrera directa.
La lucha por un plan obrero para la minería, en base a la integración de Huanuni y Vinto y la nacionalización bajo control obrero colectivo está a la orden del día.