El 2 de junio en las elecciones de la Federación de maestros paceña volvió a imponerse URMA (POR), aunque con un resultado más ajustado que en ocasiones anteriores, superando al segundo frente, MAS-VIVE (un bloque reformista progubernamental) por siete puntos. Votaron 18.777 maestros (la mayor participación registrada en las elecciones de la federación). URMA obtuvo 7.988 votos (el 47%); MAS-VIVE logró 6.874 (40%) y FUN-RA (impulsada por la burocracia de la Confederación y los stalinistas del PCB) sólo 2.248 votos (el 13%). La nueva directiva se integrará proporcionalmente a los votos.
La importancia política de las elecciones en este importante sector era evidente. El MAS apostaba a desplazar a una conducción combativa, considerada "trotskista" y que se opone por izquierda al gobierno, siendo sus principales dirigentes, como Wilma Plata, José Luis Alvarez y otros, militantes del POR. Pero el partido de gobierno fracasó en el intento pese a la popularidad de Evo Morales y al respaldo oficial al frente MAS-VIVE.
Más allá de nuestras diferencias políticas y sindicales con URMA-POR, coincidimos en la importancia de defender la independencia política de la federación frente al gobierno y por ello saludamos este triunfo.
Ahora URMA tiene ante sí una gran responsabilidad. La Federación debería convertirse en un puntal no sólo de la lucha por las reivindicaciones sectoriales, sino de la organización obrera en todos los terrenos, sumándose al esfuerzo por construir un movimiento por la independencia política de los trabajadores.
Por supuesto esto no significaría disolver a su propia organización política, el POR, sino impulsar un bloque progresivo con otros sindicatos combativos, luchadores y grupos obreros y socialistas para dar la batalla por la organización sindical y política obreras en los cientos de empresas, fábricas y talleres que representan a la inmensa mayoría del proletariado todavía desorganizado.