EN ESTAS ÚLTIMAS SEMANAS vimos a las bandas fascistas juveniles en plena acción dentro de los 5 departamentos que integran la media luna. La Unión Juvenil Cruceñista es la punta de lanza en la defensa de los intereses terratenientes y empresariales de la oligarquía, escoltada por los grupos de choque de otros departamentos: “Jóvenes por la Democracia” en Cochabamba, “Juventud del Moto Méndez” en Tarija, Juventud Democrática en Sucre, como también en Beni y Pando.
El extremo que han alcanzado estas hordas es impresionante. Las acciones que llevaron a cabo van desde simples bloqueos, hasta la reducción de la policía, e incluso provocaron el escape de los militares en Sucre, luego de golpear y humillar a nuestros hermanos campesinos. Las elocuentes imágenes han recorrido los medios de comunicación nacionales y del exterior demostrando a todas luces su salvaje racismo y hasta donde están dispuestos a llegar para defender sus tierras y sus grandes propiedades.
Pero en Santa Cruz ya no la tienen tan fácil, pues viene surgiendo una creciente resistencia, como en el Plan Tres Mil, enorme y combativo asentamiento de cientos de miles de trabajadores pobres, que no les tiembla el pulso a la hora de enfrentar a los “niños ricos” de la capital oriental.
Pero el gobierno del MAS, fiel a su política de diálogo y concertación con la derecha, le ata las manos a los sectores que quieren resistir, dejándolos aislados.
Por eso, frente a la arremetida de la derecha y sus bandas fascistas es necesario reorganizar a la juventud antifascista en todo el territorio nacional y en forma independiente del gobierno.
En La Paz y El Alto varios colectivos y organizaciones de izquierda, realizamos diversas acciones contra la derecha y todo tipo de reuniones, asambleas y actividades como festivales etc. Desde la juventud de la LOR-CI proponemos retomar la organización de la Juventud Antifascista de la Paz y El Alto, para poner en pie a miles de jóvenes, para movilizarnos junto a los trabajadores y el pueblo, divulgar en las fábricas, comunidades, barrios y establecimientos educativos, la necesidad de enfrentar a la derecha en las calles, y discutir ampliamente la necesidad de un programa para triunfar.
Por Daniel Cuba y David Dias